Muchos padres de familia tienen la inquietud de cuales son las implicaciones que conlleva exponer a los niños a un ambiente de crianza bilingüe. Existen muchas interrogantes acerca de los retrasos o confusiones que puede sufrir el niño al ser expuesto a dos idiomas a tan temprana edad. Incluso  muchos padres de familia se desaniman porque se les aconseja erróneamente que aprender dos idiomas puede confundir a sus hijos y causar retrasos en el habla. Esto no es así.

Uno de los mitos más generalizados es que un niño que aprende dos idiomas a la vez se confunde y utiliza los dos idiomas sin diferenciar uno del otro. Pero según Bárbara Zurer Pearson, investigadora de la Universidad de Massachusetts experta en bilingüismo y autora del libro “Criando un niño bilingüe” el bebé a los pocos días de nacido ya puede diferenciar entre un idioma y otro especialmente si estos dos idiomas son muy diferentes entre sí y en el caso de idiomas más similares el niño  logra diferenciarlos alrededor de los 6 meses de edad.

Es importante mencionar que existe la posibilidad de que cuando el niño bilingüe comience a hablar empiece a  obtener su vocabulario de ambos idiomas y por lo tanto construya frases como “drink leche” pero esto no significa que no diferencie entre uno y otro. Los expertos en bilingüismo concuerdan en que mezclar dos idiomas es algo transitorio y desaparece a medida que el vocabulario del niño  va aumentando en ambos idiomas.
Es probable que el mito sobre la confusión de idiomas tenga sus bases en  investigaciones bastante antiguas que aseguraban que aprender dos idiomas a tan temprana edad era contraproducente y de esta manera provocaron que muchos profesionales aconsejaran erróneamente a los padres de familia a evitar el bilingüismo y lo continúen haciendo hasta el día de hoy.
Investigaciones  actuales demuestran que el ser  bilingüe tiene muchas ventajas, como por ejemplo  la capacidad para pensar de forma más flexible. En el nivel  semántico, los niños  bilingües tienen dos o más palabras para cada concepto, lo cual se traduce en más de una manera de resolver problemas. Otros  estudios sostienen que los niños expuestos a varios idiomas son más creativos y sus circuitos cerebrales se programan para que en el futuro el niño este más preparado a aprender más idiomas; así mismo tienen un mejor desarrollo metalingüístico que es la capacidad de  comprender la estructura y los componentes del lenguaje, una habilidad importantísima para el aprendizaje. También se ha demostrado que estos niños tienen más capacidad de concentración para fijar la atención cuando  así se requiere.

Otro temor infundado es que el niño se demore más tiempo en empezar hablar .Es cierto que algunos niños bilingües suelen tardar un poco más que los niños monolingües, sin embargo no es una regla general y si se diera es nuevamente un retraso temporal.

Numerosas investigaciones sobre el bilingüismo revelan que la gran mayoría de los niños bilingües alcanzan las distintas etapas del desarrollo del lenguaje aproximadamente al mismo tiempo que los niños monolingües.

Como todos los niños van desarrollando habilidades a su propio ritmo, las edades específicas varían de un niño a otro sin importar que se les hable en uno o dos idiomas. Algunos niños dicen sus primeras palabras al cumplir un año de edad mientras que otros lo hacen al año y medio y esto no es diferente en el niño bilingüe.
Igualmente puede presentarse en ellos  un “etapa de silencio” en  el que parecieran estar aprendiendo el segundo idioma y esto es normal si podemos confirmar que el niño  comprende el lenguaje pasivo es decir sigue instrucciones e intenta responder en formas no verbales a la comunicación en el segundo idioma, aun cuando todavía no utilice el lenguaje expresivo o verbal.

Es  importante dejar de creer que el bilingüismo puede ser nocivo para el desarrollo del lenguaje en el niño sin embargo si usted tiene dudas al respecto es mejor que consulte a un profesional. Si usted desea brindar una educación bilingüe a su hijo mi recomendación es que cada padre se dirija a él  en el idioma que más domina ya que a estas edades  lo más importante es brindarle a su hijo  un modelo lingüístico correcto Por ejemplo si uno de los padres  habla mejor inglés y el otro mejor  español entonces cada uno debe hablar con su hijo en el idioma en el que se desenvuelve mejor.

Lic. Rocío Vargas

Terapeuta del Lenguaje, Habla y Voz.