El lenguaje en el primer año de vida : la etapa pre-lingüística

El lenguaje en el primer año de vida : la etapa pre-lingüística

Es importante que los padres de familia tengan claro qué deben esperar y observar en el desarrollo del lenguaje de su bebé durante el primer año de vida. Aunque el bebé no se exprese verbalmente , sí se comunica mediante su llanto , señas y otros sonido y es importante identificar cómo lo hace. Muchos padres  esperan que el niño hable antes de tiempo y se muestran ansiosos si no lo hacen; otros no le dan a este aspecto la importancia que merece y cuando buscan ayuda es más difícil su tratamiento. Es por esto que el siguiente artículo pretende darles una guía al respecto.

El desarrollo del lenguaje involucra varias habilidades o destrezas del niño: la primera es el área cognitiva, ya que es en la corteza cerebral donde se recibe, procesa y elabora la información y desde donde se inician diversos procesos como la atención, la memoria y la concentración. El área social-afectiva porque el lenguaje implica comunicarse con otras personas.  La audición, porque la percepción auditiva adecuada es base de la comprensión del lenguaje. El área motora, porque las estructuras fonoarticuladoras deben funcionar de manera adecuada para lograr la correcta articulación de los sonidos y la adecuada expresión verbal.

Así mismo, en el desarrollo del lenguaje se pueden distinguir dos grandes fases o etapas: la etapa prelingüística y la etapa lingüística.

La etapa prelingüística comprende desde el nacimiento hasta los doce meses, momento en que suelen aparecer las primeras palabras. En esta etapa tienen lugar varios hechos importantes que los padres de familia deben reconocer.

A partir del nacimiento, el bebé se comunica a través del llanto, de este modo indican que hay algo que no les agrada, que tienen hambre, que tienen sueño y la respuesta de sus padres a ese llanto va a brindarle posteriormente seguridad para transtimir sus necesidades y emociones.

Hacia el segundo y tercer mes de vida se da la aparición del gorjeo que son sonidos guturales, al final de la garganta como “agu”, “ago”y ciertos grititos con los que descubren su propia voz y experimentan con ella.

Entre el quinto y sexto mes se da la aparición del balbuceo reduplicativo que se caracteriza por una combinación de sonidos vocálicos y consonánticos caracterizados por sonidos de máxima oposición articulatoria utilizando un sonido oclusivo como la P y una vocal abierta como la A.  Es por esta razón que ud escucha a su bebé articulando repetidamente sílabas  como ta- ta- ta o pa-pa . ( no , el bebé no esta diciendo papá !)

Generalmente entre el octavo y doceavo mes el bebé comienza a utilizar  gestos para mostrar o señalar objetos de su interés , decir adiós con la mano, etc.

Finalmente, después del noveno mes, se da la aparición de  los sonidos fonéticamente estables  y son sonidos que ya están relacionados con los sonidos del habla adulta.

Siempre que el bebé emita estos sonidos debe de respondérsele. El niño descubre que sus emisiones producen un efecto en las personas, especialmente sus padres, si se le estimula  a repetirlos de nuevo  se favorece  el desarrollo de esta etapa para el afianzamiento de su futuro lenguaje

Estos intercambios, aparentemente sin importancia, constituyen la esencia de la comunicación humana, el origen de los primeros diálogos. Como les recuerdo a los padres que asisten a mi consulta. Los niños no reciben clases para aprender a hablar en los primeros meses de vida. Su padre o su madre no se sientan a enseñarles los sonidos uno por uno o las reglas gramaticales para formar oraciones. Solamente reciben estímulos del ambiente (obviamente si el resto de su desarrollo cognitivo y auditivo es adecuado) y esto es suficiente para que en 12 meses el niño esté listo para decir sus primeras palabras ,

Recuerde que la mejor forma para estimular el lenguaje de su pequeño es su  propia voz.